Una mujer fue secuestrada y a partir de esa fecha, severamente violada por terroristas de ISIS. Ekhlas fue una joven que gozaba de la tranquilidad de su pueblo, una localidad ubicada al norte de Irak.
Un día todo se volvió una pesadilla cuando un grupo de hombres pertenecientes a la organización terrorista del Estado Islámico ataco a su pueblo, raptando a ella junto a otras jovencitas para convertirla en su objeto sexual, como si se trataran simplemente de un objeto de satisfacción.
Cuando ella recuerda ese día terrorífico se le vienen a la mente las escenas donde aquellos hombres llegaron, plantaron su bandera de color negro, mataron a los hombres y niños, violaron a las mujeres y raptaron a las más jóvenes, todo ocurrió un día de agosto,
A partir de ese día ella estaba condenada a soportar los abusos diarios por parte de su raptor y golpeada si trataba de poner resistencia. Y lo que es peor, en varias ocasiones fue obligada a tener relaciones sexuales con sus canes, pues los límites de la locura no existían para este mercenario.
En muchas ocasiones traté de matarme, pero en mi había algo que me mantenía de pie, y era esa esperanza de salir en libertad algún día, afirmó en una entrevista para la BBC la joven que actualmente tiene 17 años y vive en Alemania, en un hospital Psiquiátrico donde se educa y recibe atención psicológica.
En repetidas ocasiones ella intento huir pero todas las veces fallaba en el intento por los terroristas volvían a tomar posesión de ellas intensificando la tortura como lección.
En repetidas ocasiones ella intento huir pero todas las veces fallaba en el intento por los terroristas volvían a tomar posesión de ellas intensificando la tortura como lección.
Ekhlas tuvo que presencia la muerte de su familia quienes fueron matados en frente de ella, una manera de operar de esta banda como advertencia para quienes desobedeciesen. Luego de algunos meses de sufrir las peores tortura ella escapo, integrándose a un campo de refugio donde Jaqueline Isaac una prestigiosa abogada estadounidense que se encarga de ubicar en países europeos a refugiados, ella recuerda el día que encontró a la joven y afirma que su estado de salud y mental estaba por los suelos que ella, temía del mundo.
Afortunadamente para estos días Ekhlas ha vuelto a sonreír y piensa en el futuro, finalmente su sueño de convertirse en abogada está poniéndose a su disposición.
Afortunadamente para estos días Ekhlas ha vuelto a sonreír y piensa en el futuro, finalmente su sueño de convertirse en abogada está poniéndose a su disposición.