miércoles, 4 de diciembre de 2019

EL PROTECTOR DE RD.







Por. Raúl Luis Serrano
@RSerrano27


Bienaventurada la nación cuyo Dios es Jehová, El pueblo que él escogió como heredad para sí. Salmos 33:12 
Huracán María 
El 18 de septiembre del 2017, el poderoso huracán María, categoría 5, con vientos de 280 KM/H, María provocó una devastación catastrófica en la totalidad de Dominica, que sufrió un apagón en toda la isla. Gran parte de las viviendas y la infraestructura quedaron sin posibilidad de reparación, mientras que la vegetación de la isla quedó prácticamente erradicada. Las islas de Guadalupe y Martinica sufrieron inundaciones generalizadas, techos dañados y árboles arrancados. El 20 de septiembre, María impactó a Puerto Rico. Se estima que 2,975 personas murieron en Puerto Rico, 65 en Dominica, 5 en la República Dominicana. La isla de Puerto Rico quedó inundada, y sin electricidad durante semanas y meses en algunos lugares, sin servicio de agua potable y telefonía en cerca del 50% de la población y 90 mil millones en pérdidas. 

En RD 
Los daños fueron muy mínimos, en comparación con Puerto Rico, Guadalupe y Dominica. Las expectativas del daño inminente eran e incalculables, por la trayectoria que seguía el meteoro, se esperaba que pasaría por el centro del país poniendo en grave peligro miles de vidas, propiedades y que colapsarían todos los sectores productivos. Todos estábamos a la espera de ser irremediablemente impactados. Sin embargo, gracias a la oración y al clamor a Dios de todos los creyentes; en el momento preciso la mano de Dios, desvió el Huracán María, gracias a Dios, solo las ráfagas dejaron copiosas lluvias en RD. Para alegría y tranquilidad de la mayoría de la ciudadanía. 

Amenazas actuales 

Hoy como en los días del Huracán María, terribles amenazas se ciernen sobre la nación, en el exterior; se sienten las ráfagas la crisis haitiana, la cual amenaza con un éxodo masivo de ilegales indocumentados que pudiera desbordar nuestras fronteras y provocar una gran crisis de refugiados. A lo interno; soplan intensos vientos de intolerancia acompañados de frecuentes tronadas de autoritarismo, poniendo en serio peligro el estado social y democrático de derecho. Ambas amenazas son de impredecibles consecuencias. 

Según la Constitución dominicana; el Lema Nacional (artículo 34) y el Escudo Nacional (Artículo 32) rezan: DIOS, PATRIA, LIBERTAD. Además, el Escudo posee una Biblia, la cual cita a S. Juan 8:32 que dice: “Y conoceréis la Verdad y la Verdad os hará libres”.  Dios y Jesucristo, están consagrados en nuestra constitución como máximos rectores de la nación. 

Se invita a los rescatistas, compuesto por cada dominicano/a que le duela su país, estar vigilante ante las graves amenazas (ya citadas), como también invitar a todos los creyentes invocar a Dios para que tome el control del país y se haga su voluntad. Alejando de nuestro país todo espíritu de engaño, que reprenda todo espíritu de malicia, para que en el nombre de Jesús se ahuyente todo espíritu de crisis política y social. Para que nuestras autoridades cumplan y hagan cumplir la constitución y las leyes, que Jehová ponga espíritu de concertación democrática. Para que el país se reencause por los caminos de la justicia y tranquilidad social. Para que las autoridades, pongan los intereses nacionales por encima de los intereses y beneficios individuales y grupales.  

Si clamas a Dios, te aseguro que, así como Dios nos protegió de la inminente devastación del poderoso huracán María en el 2017, nos protegerá y librará de las crisis política y social que nos amenazan, porque: “De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan.” Jehová es tu guardador, Jehová es tu sombra a tu mano derecha. Jehová te guardará de todo mal… Salmos 24:1; 121:4,6 
¡Amén!